En Seboruco, Venezuela, se impone la autoridad del ELN, ante la mirada de los militares

Son los guerrilleros, conexos con el narcotráfico, los que se tomaron esta población en zona fronteriza con Colombia. Un panorama que ejemplariza la crisis de un país en el que se perdió la autoridad. El régimen de Nicolás Maduro es permisivo ante esta realidad.

CRÓNICA DE VENEZUELA

Lunes, 27 de julio del 2020

En otrora fue una población tranquila, de hombres y mujeres trabajadoras, dedicadas a las labores de la agricultura, la artesanía y en donde se concentran muchos intérpretes y agrupaciones musicales. Es uno de los veintinueve municipios encuadran el  Estado Táchira, a los pies del monte andino venezolano, en el sector fronterizo con Colombia.

Por sus calles ahora se ven carros que llevan hombres armados, que visten prendas militares. Son los que hacen los patrullajes. Los guerrilleros del ELN son la autoridad en esta población. Así lo denuncian sus habitantes, pero entre dientes, por temor a represalias. Aseguran que allí se “impone la soberanía de ellos, los guerrilleros”. Se cuentan más de 200 de los ‘elenos’ que recorren la población en moto.

Los comandantes, en cambio, se movilizan a bordo de camionetas, que según lo dice la gente son los de la Guardia Nacional Bolivariana los que les surten el combustible, otros dicen que intimidan a los dueños de las fincas para que les consigan gasolina.

El que se vean por todos lados no es para nada aislado con otros hechos que ocurren nacionalmente.  Se habla que régimen le está cediendo el control de las regiones a los guerrilleros.  De hecho se conoce de un  video que circula por las redes sociales, que grabó Álvaro Díaz Tarazona, alias Edward, uno de los jefes del ELN, sale jurando fidelidad al presidente Nicolás Maduro.

EL HOME NOTICIAS, en una nota con fecha 21 de julio del 2020, denunció que a este jefe guerrillero el régimen de Maduro le expidió la ciudadanía venezolana, este medio publicó el documento.

Leer nota relacionada: Nicolás Maduro otorgó ciudadanía venezolana a jefe militar del ELN, alias Edward.

Pero hay algo que viene a ser el augurio de ese futuro incierto, es de lo que más aterroriza a los más de 15.000 habitantes de esta región, que los guerrilleros ya no están solos, desde hace unos días se le ve acompañados de expresidiarios venidos de diferentes cárceles del país. Son los encargados del trabajo comunitario.

Se hacen constantes reuniones en distintas aldeas, la más reciente se hizo el pasado 18 de julio en el sector de Las Flores,  a la que deben asistir los comerciantes y dueños de las haciendas ganaderas, son para determinar quiénes serán los encargados de liderar  los llamados Consejos Comunales. Son los jefes del ELN los que les dan el reconocimiento, solo a aquellos tengan en sus bases a los fieles al régimen.

Estos líderes son los encargados de coordinar el reparto de las ayudas de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) y hasta el reparto de los puestos de trabajo en las diferentes entidades.

Los elenos establecieron sus propias leyes y son los que exigen que las personas cumplan con las medidas de bioseguridad en estos días de pandemia. Es más, hasta amenazan con castigar a las mujeres infieles a sus maridos.

Los elenos están en la mayoría de las aldeas como Palmarito y Los Ríos, y son los que controlan la movilidad en la región. “Para ir de una población a otra se necesita un permiso del ELN”, contó uno de sus habitantes. Hasta son ellos, dijo otra persona del municipio,  los que imparten el toque de queda y dicen cuál es el horario que se debe cumplir.

Además, se cuenta que la presentación oficial ante la comunidad se hizo el pasado 24 de julio en la aldea Nuestra Señora de Coromoto, en el caserío Los Ríos. Esta convocatoria de asistencia obligatoria fue presidida por un comandante que se identificó como ‘Yirson’.

Fue este jefe guerrillero el que anunció que a partir de ese momento ellos estarían en esa región y que sería el ELN el que establecería las normas de convivencia, que nada se podría hacer sin el consentimiento de ellos. Hasta designaron tareas, se escogieron líderes que serán por orden de los guerrilleros de formar grupos para la limpieza de las calles.

Lo extraño de todo, comentó un testigo, es que allí permanecen los militares de la Guardia Nacional Bolivariana, a los que los guerrilleros saludan con mucha familiaridad. Los uniformados del régimen siguen ejerciendo algunos controles como la recuperación del espacio público.

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Redacción Noticias de Venezuela

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