Leandro Díaz, un milagro de la vida hecho poesía, cumpliría 93 años

Un 20 de febrero nació uno de los más encumbrados compositores colombianos, uno de los juglares de la Costa Norte. En vida se le llamó como el ‘filosofo del vallenato’. Un hombre admirado, ejemplo de superación, quien superó su incapacidad visual con sus ojos del alma. Rendimos homenaje a este valiente del canto.

CULTURA

Sábado, 20 de febrero del 2021

El compositor guajiro, Leandro José Díaz Duarte, estaría cumpliendo este sábado de febrero 93 años, casi un siglo de leyenda. El maestro, nacido en Hato Nuevo, partió de este mundo el 22 de junio del 2013, fue el autor de más de 300 canciones, que expresaron su sensibilidad poética.

Pese a ser invidente logró a través de su obra describir la belleza de la mujer, la plenitud de los amaneceres, de pintar los colores de la preciosidad del paisaje de su tierra natal y describir la grandeza del amor puro.

Su grandeza fue exaltada en un homenaje que le rindió Valledupar en el que se le declaró como ‘Rey Vitalicio del Festival de la Leyenda Vallenata’, esto en la edición número 38 del certamen más importante del género fecundado en las sabanas del Cacique Upar.

“Cuando el rey llega de tarde, que mira el jardín florecido. Cuando la diosa mueve el caderaje, se pone el rey más engreído y llega la mira con anhelo y dice gracias le doy al cielo, que viva alegre en la sabana, ya tiene su diosa coronada, que canta el pobre Leandro Díaz triste por la serranía”.

De Leandro siempre se recordará su primera inspiración vallenata prensada en un disco, ‘A mí no me consuela nadie’, que fue grabada en 1955 por otro juglar, Luis Enrique Martínez, una poesía hecha canción en la que subraya su necesidad de no tener a alguien que le brindara consuelo, mientras sobrellevaba su pena.

“Si quiera a ustedes andan gozando, a mí no me consuela nadie. Emilianito está muy bien posesionado y Rafael está casado con Marina, Simón Salas y Julio Suárez andan gozando y Leandro Díaz solito en la vida”.

Desde ese momento se empezaron a conocer muchos versos, de un cantor que miraba con los ‘ojos del alma’, destacándose entre ellos ‘La diosa coronada’, que le inspiró una mujer difícil de convencer, aquella que nunca le prestó atención a sus encantos.

Se dice que su primera canción la compuso cuando a la edad de 17 años, a la que nombró como ‘La loba de ceniza’,

Sus letras  lo convirtieron en toda una leyenda, porque siempre sonarán canciones como ‘Matilde Lina’, ‘La Gordita’, ‘Cardón guajiro’, ‘Dios no me deja’, ‘El bozal’, ‘El mal herido’… entre otras.

Redacción Noticias de Cultura

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