‘El rector Carlos Prasca nunca me acosó, todo fue un montaje de unos profesores para tumbarlo de la rectoría’: Laura Romero Peña

Lectura de Domingo:

Esta ha sido la declaración de la estudiante de la Universidad del Atlántico que tuvo en cuenta la Procuraduría para determinar que el rector Prasca es víctima de un juego político con el que pretendían sacarlo de su cargo. Según la estudiante, líderes de izquierda se prestaron para semejante entramado criminal. Esta es la primera parte de la otra historia de un escándalo en la Costa.

JUSTICIA

Domingo, 1 de septiembre del 2019

¿Se trató de un montaje político? ¿Qué tuvo que ver la izquierda, metida en la Universidad del Atlántico, con la desacreditación hecha al rector Carlos Javier Prasca? ¿Por qué la Procuraduría determinó que no tuvo nada que ver con las acusaciones que le hicieron? ¿Quiénes están detrás de este montaje?

Son algunos de los interrogantes que rodearon el escándalo que tuvo a punto de sacar a Prasca de la principal universidad pública en Barranquilla.

Para tener claridad de este tema es importante hacer precisiones de fondo y contar lo que la estudiante, al parecer afectada, denunció.

Empecemos por decir que la Dirección Nacional de Investigaciones Especiales de la Procuraduría General de la Nación desplegó todas sus prácticas probatorias. Lo mismo hizo la División de Policía Científica y Criminalística. Ambos organismos decidieron, se lee en el expediente, que después de evaluar e indagar la situación de la Universidad del Atlántico no se halló merito suficiente para separar de su cargo al rector  Carlos Javier Prasca Muñoz. Fue suspendido por tres meses, pero esta inhabilidad se levantó y hoy regresa a sus actividades administrativas y académicas.

Esta respuesta de la Procuraduría tiene que ver con el proceso disciplinario preliminar que se adelantó ante denuncias  que se hicieron en su contra por el supuesto acoso sexual de unas de sus estudiantes. Los acusadores usaron en su ataque unos audios en los que, supuestamente, Prasca Muñoz habría tenido conversaciones comprometedoras con una de sus estudiantes.

Sin embargo, después se supo que estos elementos no eran otra cosa que un complot, una mentira que se maquinó, tal y como lo aclaró la misma estudiante, Laura Romero Peña, la supuesta víctima. De hecho la joven se fue hasta la Notaría Séptima del Círculo de Barranquilla, el pasado 12 de febrero,  para de “manera libre y espontánea” dejar sentada su declaración juramentada, desmintiendo a los responsables del escándalo,  documento en poder de EL HOME NOTICIAS.

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“Jamás he tenido ningún tipo de relación afectiva con el mencionado rector a quien conozco por las circunstancias de ser estudiante de la Universidad del Atlántico, razón por la cual sólo lo he visto con ocasión a las diferentes actividades programadas por la universidad a nivel docente y estudiantiles de todo orden. Debo manifestar, que jamás he tenido relación de carácter sentimental alguna con el señor Prasca Muñoz. Por consiguiente, jamás he tenido relaciones íntimas como tampoco he sido acosada sexualmente”, declaró Laura Romero Peña.

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En el mismo documento la universitaria denunció a dos docentes de la Universidad: a Roberto Figueroa Molina y a Antonio Vallejo Morales (exrector), de ser quienes influyeron para fraguar el montaje.

Declaración ante un notario de Barranquilla que realizó la estudiante de Derecho de la Universidad del Atlántico, Laura Romero Peña, acusando a dos profesores de fraguar una maniobra oscura en contra del rector Carlos Prasca.

El propósito de ellos, escribió Romero Peña, era que denunciara a Prasca, la intentaron convencer para que sostuviera una invención: “Que dicho señor me había accedido sexualmente o había abusado sexualmente de mí. Incluso, el profesor Figueroa Molina me consiguió una psicóloga y un abogado, para sacar adelante esta historia en contra del profesor Carlos Prasca”.

En su declaración la estudiante aseguró que pertenecía a la Juventud Comunista (JUCO), grupo de izquierda que influye en la comunidad estudiantil, de lo cual asegura hoy se encuentra arrepentida después de haber sido objeto de una “manipulación”.

Lo más grave de este asunto, que está en la declaración que hace Laura Romero Peña, denuncia directamente uno de los profesores, quienes se fueron hasta donde ella para persuadirla con el “argumento de que había que desmontar a Carlos Prasca de la rectoría a como diera lugar”. 

No obstante, se lee en el escrito, la estudiante se negó. Asegura que le propusieron abiertamente que tenía que hacer algo para reivindicarse con la JUCO, realizando un montaje con unos audios, declarar sin ser cierto en contra de Prasca.

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“En donde apareciera mi voz en la cual no acepté y me negué. Toda vez que pretendían armar un entramado delictivo contra Prasca para sacarlo de la rectoría”, aseguró Laura Romero Peña.

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Pero esto no quedó allí, porque el plan engañoso –de acuerdo con el testimonio notarial de la universitaria– siguió adelante.

“Cuál fue mi sorpresa cuando vi por la prensa  que efectivamente habían realizado ese montaje”, precisó Moreno Peña.

Después de jurar ante un notario que estaba diciendo la absoluta verdad, la estudiante de Derecho precisó que las grabaciones difundidas a través de los medios de comunicación y por redes sociales fueron el producto de un cuidadoso trabajo de edición, en los que se mezclaron varias conversaciones.

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“Esas supuestas grabaciones difundidas a través de esos audios no corresponden a la realidad, no corresponden a un mismo escenario, son un montaje, porque como he dicho, es un acto que venía siendo planeado por opositores de la administración actual de la Universidad”, puntualizó Romero Peña.

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La universitaria dejó claro que está dispuesta a ir hasta la autoridad judicial para denunciar a los responsables de semejante acto criminal, que no solo afectó a Prasca, también su buen nombre y el de su familia.

Como prueba de ello, hasta la madre de la estudiante, la señora Ángela Adriana Peña Peña, también fue ante el mismo notario e hizo su declaración juramentada, del daño moral que le ha hecho. “A ella le propusieron ser parte de un complot para tumbarlo de la rectoría, dado que tenían una voz parecida a la de Prasca”, reveló la señora.

Este episodio ahora tendrá otro escenario, los estrados judiciales, a donde aseguró la estudiante y su familia será llevado el bochornoso caso con el que según la ley se “lesionó la dignidad de varias personas”.

Redacción Justicia

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