Otro proceso que engavetó la Inspección General de la Policía, el de las ‘chuzadas’ en la POLFA

La Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales solicitó a la institución la apertura, por competencia, de un proceso disciplinario ante graves denuncias, en contra del coronel Óscar Cortés Dueñas, sin embargo en tiempo record, con poca información obtenida, se cerró el caso. Este está vigente en la Procuraduría.

UNIDAD DE JUSTICIA

Viernes, 31 de julio del 2020

EL HOME NOTICIAS publicó en su momento que hubo el acceso a las denuncias en las que se revelan hechos irregulares ocurridos en la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN), en las dependencias de la Policía Fiscal y Aduanera (POLFA).

Se precisó hace un año que estos ocurrieron, según la denuncia,  siendo director de esta unidad policial el general (r) Juan Carlos Buitrago Arias. Todo esto basado en procesos e investigaciones, que están en curso tanto en la Procuraduría como en la Fiscalía.

Asevera la denuncia, que hubo acceso ilegal a la base de datos, al Sistema Perseo,  que contiene información privilegiada, de uso exclusivo de la DIAN. Se dice que el acto irregular se hizo con fines personales y sin una orden judicial.

Paralelo al proceso de la Procuraduría internamente la DIAN adelantó su propia indagación, que se admitió como una queja disciplinaria, en la que –además de ser mencionado el general Buitrago– también se nombra al teniente coronel Óscar Hernán Cortés Dueñas y a otra funcionaria. 

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¿Qué es Perseo?

Según la DIAN “es un Sistema Integrado de Análisis de Contrabando, una novedosa herramienta tecnológica que integra 23 bases de datos, las cuales permiten la identificación de sistemas de economía criminal dedicadas al contrabando”, que aplica a través del monitoreo y seguimiento de operaciones comerciales sospechosas.

En este Sistema de Inteligencia, se utilizan dispositivos móviles, que en tiempo real facilita información de personas vinculadas al sector público y privado, a las que se les puede hacer seguimiento, sí se desconfía que andan en actividades ilícitas. Con las 23 bases de datos la información se articula estratégicamente con la Unidad de Información y Análisis Financiero (UIAF), organismo de inteligencia económica del Estado.

Todo esto para llegar a comprender el alcance de este músculo informático, del que según la denuncia fue mal utilizado en la POLFA. Se habla que se ingresó para conocer los movimientos financieros de determinadas personalidades, entre estas oficiales de la Policía que estaban a punto de sus ascensos en el 2018, y hasta congresistas de determinadas comisiones. Es decir que con los datos que este Sistema Integrado administra se facilita la contrainteligencia.

Los denunciantes entregaron detalles de cómo se ‘chuzó’ la información y solicitaron que se comprobara lo dicho a través de la trazabilidad, hasta revelaron claves de acceso, las cuentas de usuarios, porque la denuncia anónima, al parecer, vino desde el interior de la misma DIAN.

Ante todos estos pormenores la Subdirección de Gestión de Control Disciplinario Interno de la DIAN solicitó a los mencionados en la denuncia que dieran una explicación.  Fue llamado a este despacho el teniente coronel Cortés Dueñas, explicaciones que no lograron convencer.

En estas diligencias internas se habla hasta del uso del polígrafo, el que habría jugado en contra del oficial. Cuando se obtuvo detalles del caso esta dependencia lo trasladó, por competencia,  a la Inspección General de la Policía, porque para la DIAN se habría infringido el régimen disciplinario.

Esta notificación, por correo certificado, se radicó en la Dirección de la Policía siendo Inspector General,   Carlos Ramiro Mena Bravo, para el inicio del que podría ser el proceso disciplinario.

Lo extraño de este asunto es que siendo una denuncia delicada, de amplia connotación,  en tiempo record la Policía declaró injustificada la queja y la misma se archivó, sin haberse solicitado ampliación ante la Dirección de la DIAN, que cuenta con un completo expediente al respecto, sobre todo al Director que es mencionado en los folios del traslado del proceso.

El acto de cierre de la investigación fue firmada por el coronel Luis Eduardo Soler Roldán, quien en ese momento estaba como encargado de la Inspección General. Una maniobra preocupante.

EL HOME NOTICIAS estableció que este procedimiento está en conocimiento de la Procuraduría General de la Nación, entidad que solicitará una revisión,  qué tipo de tareas se hicieron ante las graves acusaciones. Es decir, que se llamará al coronel Soler Roldán para que explique los fundamentos que tuvo en su momento para dar por terminado, en el mínimo tiempo, el proceso disciplinario.

Es decir, que ahora el nuevo Inspector, general William René Salamanca, tiene a cuestas esta significativa labor, de rebuscar los documentos y sacarlos de la gaveta a donde fueron hundidos. El de reabrir por sugerencia de la Procuraduría la diligencia.

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¿Qué pasó con el otro caso?

El 21 de febrero del 2018 ante la Inspección General de la Policía fue radicada otra denuncia formal en contra del teniente coronel Cortés Dueñas, quien ocupaba el cargo como jefe de la División de Gestión de la Policía Fiscal y Aduanera de Cúcuta, Norte de Santander. El 6 de marzo del mismo año se hizo la apertura de la indagación preliminar.

Al oficial se le acusó entonces, ante el área de Asuntos Disciplinarios, de presunto acoso sexual y laboral en contra de la patrullera Leidy Yadira López Ocampo, madre soltera, que para esos días su hijo  tenía cinco años.

En ese tiempo se ordenó la práctica de las pruebas testimoniales del personal de la POLFA de Cúcuta, entre estos el de la presunta afectada, quien crudamente relató la manera como el oficial hasta le habría negado la oportunidad de estar con su hijo los fines de semana, al parecer por no acceder a sus pretensiones. Relató una suerte de episodios, que consta en 12 folios, que según ella empezó a darse desde el 2016.

Sin embargo, la respuesta por parte del mando institucional para entonces fue la de ordenar el traslado de la patrullera López Ocampo para el departamento del Vaupés. Se habla de que fue víctima de persecución. Conclusión, esta denuncia que estuvo acompañada de un escándalo a través de los medios nacionales no prosperó, también se atascó en la Inspección General de la Policía.

Según el abogado James Marín Jiménez, apoderado de la patrullera López, no existe «las suficientes garantías procesales» y es por esto que solicitó, hace dos años, a la Procuraduría, valiéndose del poder disciplinario preferente, que se encargue de la diligencia. Sin embargo, a la fecha se continúa a la espera de una respuesta ante esta otra grave denuncia.

Por último, a propósito de esta denuncia, por supuesto acoso sexual a una subalterna y persecución laboral, parece que este fantasma persigue al coronel Cortés, porque recientemente se conoció una nueva denuncia, de otra situación con detalles ajustados con el mismo patrón.  Supuestamente, los hechos ocurrieron en la fiesta de Fin de año en el Club de Agentes de la Policía, en Bogotá.

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Redacción Unidad de Justicia

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