Tuluá, Valle del Cauca, asaltado por el terrorismo, incendiaron el Palacio de Justicia

Un acto delincuencial convirtió en escombros uno de las edificaciones más emblemáticas de este municipio. ¿Cuál es la objetivo de incendiar el lugar en donde se llevan importantes procesos judiciales, en particular contra las mafias de la droga en el departamento?

Valle del Cauca

Martes, 25 de mayo del 2021

El Palacio de Justicia de Tuluá, Valle del Cauca, fue devorado por las llamas. Esta edificación, de las más queridas e históricas de esta población fue objetivo de los grupos terroristas en Colombia.

Diferentes estamentos calificaron este acto como demencial, como terrorismo, porque el quemar esta edificación tiene absolutamente nada que ver con las protestas.

Voceros del Cuerpo de Bomberos de este municipio aseguraron que los vándalos impidieron el paso de sus máquinas, lo que impidió llegar a tiempo a atender la emergencia.

“La situación está un poco complicada, entonces no hemos podido ir a cumplir con nuestra labor para apagar el incendio estructural, pero estamos en una valoración inicial y esperando que tengamos el área segura para poder ir a operar”.

Desde el Consejo Superior de la Judicatura se condenó el ataque de la inmueble: “La puesta en peligro de vida e integridad de servidores de despachos judiciales. ¡Los actos violentos deben cesar! La prioridad es la vida y la justicia, garante de derechos fundamentales de los ciudadanos”.

El organismo encargado de administrar los recursos de la Rama Judicial hizo ver que este acto tiene propósitos oscuros.

“Actos violentos como el sucedido en Palacio de Justicia de Tuluá ya ha ocurrido en otras sedes judiciales. La destrucción de expedientes no puede ser un fin, pues obstaculiza el propósito de construir una sociedad más justa”.

El ministro de Defensa, Diego Molano, también se pronunció ante lo sucedido, insinuó que se trata de un acto premeditado, de obstrucción a la justicia.

“Ocurrió en una URI en Popayán, también en la casa de justicia en La Plata. Ahora pasa en Tuluá. Los vándalos quieren obstruir la justicia con quemas como la de esta noche del Palacio de Justicia en Tuluá. Infame que lo celebren. Los responsables van a conocer el peso de la Ley”, escribió Molano.

Lo que ha acontecido en Tuluá lleva a recordar lo que ocurrió el 6 de noviembre de 1985 en Bogotá, la toma del Palacio de Justicia, cuando el M-19 cumplió el plan del capo de la droga Pablo Escobar Gaviria, de quemar el edificio con sus expedientes relacionados con la extradición de narcotraficantes a Estados Unidos y de asesinar a los magistrados que llevaban estos procesos.

Esto lo confirmó el exjefe de sicarios del Cartel de Medellín, Jhon Jairo Velásquez, que su ‘patrón’, Escobar, le pagó al grupo guerrillero para que perpetrara el cruel acto terrorista, una clara «obstrucción a la justicia».

Redacción Regional

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