Coronavirus:

La mayoría de médicos y enfermeras no pueden ir a sus sitios de trabajo por falta de gasolina

Es la denuncia que hizo el diputado a la Asamblea, José Manuel Olivares, que el personal de la salud no se pudo movilizar a sus centros asistenciales por la falta de combustible. Además, hizo serios cuestionamientos del manejo de la información de contagiados y muertos por el COVID-19 que está ofreciendo el régimen de Maduro. A la crisis sanitaria se le suma la crisis social.

VENEZUELA

Sábado, 4 de abril del 2020

No existen cifras concretas de la emergencia social por el coronavirus, que ni los voceros del régimen se ponen de acuerdo con el balance de lo que está viviendo Venezuela.

Según José Manuel Olivares, diputado a la Asamblea Nacional, el pasado 29 marzo Jorge Rodríguez Gómez, Ministro para la Comunicación y la Información, dijo que para esa fecha se habían realizado 37.000 pruebas tipo PCR y que, además, también se hicieron 50.000 pruebas rápidas. Sin embargo, Delcy Rodríguez, vicepresidente, había dicho tres días antes que el total de pruebas realizadas había sido de 1.836. Es decir que en tampoco tiempo desaparecieron más de 1.000 pruebas.  ¿Quién está mintiendo?

Olivares además precisó en rueda de prensa virtual que a la crisis humanitaria por el COVID-19 se le suma la grave crisis social debido a la falta de gasolina. Aseguró que el 62 por ciento del personal de la salud no pudo moverse a sus sitios de trabajo, que el 84 por ciento de los médicos no hallaron combustible, y que al menos un 66 por ciento de los venezolanos pasaron entre 8 y 20 horas haciendo filas para surtir de gasolina sus vehículos.

De paso el diputado a la Asamblea también que las cifras en cuanto a la infraestructura hospitalaria no son muy alentadoras.

 “En la Ciudad Hospitalaria Dr. Enrique Tejera, estado Carabobo, hay solo siete camas disponibles para terapia intensiva; en el estado Amazonas sólo hay dos camas y ventiladores mecánicos para atender a toda la población; el Hospital Seguro Social del Táchira no tiene terapia intensiva; el hospital Luisa Ortega Díaz, de Nueva Esparta, no tiene camas de terapia intensiva; y el pediátrico más importante de Caracas, hospital JM de los Ríos, tiene la atención intensiva parcialmente cerrada”.

 

Precisó, además, que existe escases de ventiladores artificiales en toda Venezuela, que solo hay disponibles entre 250 y 300 de estos aparatos para atender a los contagiados con el coronavirus.

 “Cuando se pretende decir que hay camas suficientes en Venezuela, es mentira, porque además no basta con un colchón. Una cama hospitalaria es mucho más que tener dónde acostarse, es contar con médicos capacitados y protegidos, un ventilador mecánico, los medicamentos que dan soporte, capacidad de aislamiento, condiciones que no se cumplen en Venezuela,” sentenció.

Es que no solo es la falta de camas y equipos, lo que más afecta la situación es la falta de agua potable en el 70 por ciento de los centros de salud. Además, que más de la mitad no cuenta con implementos como jabón, guantes, mascarillas y alcohol, indispensables para la protección del personal médico.

Redacción Noticias de Venezuela

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