Coronel José Palomino, también es acusado de posible montaje por celos, del envío a la cárcel de un suboficial por bailar con su esposa

Palomino afronta denuncias penales y disciplinarias por acoso laboral y hasta por el abuso, para amedrentar, con el polígrafo. Es uno de los protegidos por la cúpula. Al punto, de que teniendo este tipo de antecedentes, de maltrato al policía, es nombrado como segundo en Talento Humano y está en lista para ascender a Brigadier General.

Unidad de Justicia

Domingo, 25 de septiembre del 2021

El coronel José Luis Palomino López, hermano del cuestionado exdirector de la Policía, Rodolfo Bautista Palomino López, ha estado involucrado en varios escándalos –graves denuncias–  entre estos uno de ‘usted no sabe quién soy yo’,  y hasta de tortura psicológica a policías. Un mal ejemplo en esta institución.

El 27 de mayo del 2020 la Fiscalía le abrió investigación ante las acusaciones que hace en su contra uno de sus subalternos, el mayor Carlos Alberto Carrero Gelves. El oficial lo denuncia por persecución laboral, hostigamiento, abuso de autoridad, injuria y calumnia y hasta violación de Derechos Humanos.

Con lujo de detalles es señalado de supuestamente ordenar a enfermeras de un centro asistencial de la Policía a que aplicasen al funcionario, a su mando, una inyección para dormirlo y declararlo como un enfermo psiquiátrico, para al parecer evitar denuncias en su contra.

Las más recientes acusaciones hacia Palomino López ocurren cuando ocupaba el cargo de comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, en donde a su paso dejó las peores cifras y la toma de peligrosas decisiones, como aquella que llevó a la muerte trágica en un campo minado de dos de sus policías, en mayo del año pasado. Pero sorpresivamente fue ‘premiado y protegido’, porque pasó a ocupar el cargo de subdirector de la Dirección de Talento Humano.

A Palomino López se le acusa de perseguir, acosar y dejar en alto riesgo la vida del entonces teniente de la Policía,  hoy capitán, Wilmer Orlando Anteliz González, dicen fuentes que se lo ‘encargaron’.

Es que Anteliz venía de denunciar al mayor (r) José Rolando Lancheros Silva, de ser parte de la nómina de las bandas narcotraficantes de ‘los MZ’ y ‘los Penagos’, que delinquían en el Tolima. Caso que sigue vigente en la Fiscalía y en poder de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Sin embargo, en la Inspección General de la Policía, en un bochornoso acto en el que hubo manipulación y omisión, archivaron el caso en contra de Lancheros.

Como si esto no fuese suficiente EL HOME NOTICIAS conoció de un nuevo proceso, que podría ser el más escandaloso de su cuestionada carrera, de haber –supuestamente– incidido en una falsa acusación en contra del intendente Hernán Toloza Gómez. Todo esto, porque al parecer Palomino López se enteró que su esposa había salido del comando en Cúcuta a una discoteca a bailar con el suboficial, estando él fuera de la ciudad.

Toloza Gómez era el hombre de confianza del coronel Palomino, al punto de ser la persona que le acompañó en las labores de trasteo de Bucaramanga a Cúcuta. Llama la atención que el uniformado reporta en su hoja de vida 43 felicitaciones especiales, es decir que fue un buen policía hasta ese día que tuvo el escandaloso incidente con su jefe.

Pero, se lee en la solicitud de investigación, en la denuncia, que el comandante no pudo aceptar que el Intendente acompañase a su joven esposa al Bar La Bomba, ubicado en el Centro Comercial Plaza del Este, en la ciudad de Cúcuta. Peor aún, que bailara con ella.

El uniformado ha dicho, por documentos en poder de EL HOME NOTICIAS, que él “siempre fue muy respetuoso con la esposa de su comandante”, pero que en esa ocasión aceptó acompañarla a la discoteca ante la llegada a la ciudad de una prima de la señora de Palomino, que había viajado desde Bucaramanga a conocer la ciudad fronteriza.

Al poco tiempo de ocurrir estos hechos el intendente Toloza Gómez fue privado de la libertad, junto a otro uniformado, el subintendente Julián David Aguilar. Ambos fueron acusados de delitos como concierto para delinquir y favorecimiento al contrabando de gasolina.

De acuerdo con la investigación, los uniformados fueron señalados de recibir dinero de bandas de contrabandistas del combustible, esto para supuestamente facilitar el paso ilegal del derivado desde Venezuela a Colombia.

Sin embargo, el pasado 1 de julio el Juzgado Primero Penal Municipal con Funciones de Control de Garantías y Conocimiento de Los Patios ordenó la libertad de los detenidos. Las razones, es que desde 18 de julio del 2019, cuando se radicó el escrito de acusación, no se ha hecho el juicio oral, toda vez que la Fiscalía no ha recopilado pruebas para demostrar que los policías sí tuvieron que ver con los delitos por los que fueron empapelados.

Este es el oficio con el que juez de Cúcuta ordena la libertad de los acusados de favorecer a contrabandistas de gasolina. (Dele clic aquí para leerlo completo).

Las únicas pruebas que presentó la Fiscalía fueron tres llamadas telefónicas que hizo una ciudadana al policía del cuadrante, el intendente Toloza, en las que solo se habló de temas atinentes al servicio policial, nada distinto o que tuviese que ver con el contrabando de combustibles. Esto para al parecer establecer que existía una amistad. Esta persona fue involucrada como presunta integrante de la red de contrabandistas.

Es decir, que se produce el vencimiento de términos, no se hallan pruebas, y a los policías se les debe restituir todos sus derechos, entre estos el regreso al servicio, a portar sus uniformes.

Es aquí en donde se genera la duda y la solicitud de la defensa del intendente Toloza Gómez de que la Fiscalía investigue si hubo incidencia de Palomino, como represalia debido a sus celos, porque el caso y la investigación se desarrollaron en tiempo récord, poco después del incidente con la esposa del comandante.

“Es posible que Palomino haya presionado para que se adelantara el proceso, que se dieran resultados rápidos,  en contra del intendente debido a su contrariedad con este policía”, le contó un cercano de este caso a este medio.

Es más se supo de un comentario, con tono de reclamo, que el coronel Palomino López le hace a su hasta allí hombre de confianza a los pocos días del episodio: “Usted es un bandido que se va a hacer capturar. Usted desde Bucaramanga embarrándola con María E.”

Precisamos, que uno de los escoltas, un intendente de apellido Sibaja, conductor en ese entonces de Palomino, fue quien constató que la señora estaba con Toloza en la discoteca, porque se había detectado por la señal del GPS que el vehículo no estaba en el comando y que marcaba fuera del Bar La Bomba.

El intendente está libre. Pero, existe una gran duda, de cuál podría ser el futuro de este Policía, de ser objeto de persecución como en los otros casos, siendo que quien toma buena parte de las decisiones laborales es el coronel Palomino López, como subdirector de la Dirección de Talento Humano.

De hecho, el suboficial fue citado en el pasado mes de agosto a estas oficinas en Bogotá apenas el juzgado notificó su libertad inmediata y allí se topó de frente con el denunciado coronel Palomino, quien le dijo que no iba a continuar en Cúcuta, que había que esperar su traslado. Este suboficial fue visto en estos días haciendo guardia en el Comando de Departamento.

A pesar de los escándalos, de las denuncias de abusos, en contra del coronel José Luis Palomino, es firme candidato a ascender a Brigadier General.

Redacción Unidad de Justicia

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Denuncian al coronel José Luis Palomino, comandante de Cúcuta,  de posible abuso de poder, tortura y acoso laboral

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